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Antes de tener el blog ya conocía algunas obras de Brandon Sanderson. Al principio de mi cuenta de instagram se puede encontrar algunos comentarios de algunas de sus novelas, pero no hacía reseñas más completas... Este año, debido al #mayoscifi, decidí leer Citónica.

He estado dudando si reseñar un tercer libro de una saga que no había reseñado tan detalladamente antes, pero luego pensé que esta novela forma parte de mis lecturas actuales. Así que, es el momento de comentar Citónica, el tercer libro de la saga Escuadrón, una de las sagas que me descubrió que su autor, Brandon Sanderson, es capaz de hacer cualquier universo y hacerlo muy bien.

De modo introductorio y breve, la saga comienza con la vida de Spensa Nightshade y su pasión por ser una buena piloto como su padre ya que murió hace muchos años en una batalla contra un grupo de guerreros alienígenas. La historia de su padre genera muchas incógnitas y Spensa necesita conocer qué ocurrió de verdad y defender la reputación de su familia. Junto a ella  le acompaña una adorada nave estelar llamada M-Bot que para mi es uno de los mejores personajes 😊

En Citónica la vida de Spensa se va complicando cada vez más. Ella ya es una de las mejores pilotos de caza estelar de Detritus que salvó a su pueblo de los Krells, los guerreros alienígenas siendo una infiltrada en la Supremacía. Allí descubrió que hay vida más allá de su planeta natal y que hay un gobierno galáctico cuyo objetivo es dominar la vida humana.

Spensa ve otra nueva oportunidad de poder salvar su mundo. Para ello deberá viajar a la Ninguna-Parte, un mundo diferente a lo visto y espacialmente mágico con islas flotantes y contrastes ambientales.